,

Enfocarse en las consecuencias lógicas

Concéntrate en las consecuencias lógicas en lugar de solo en el castigo. Es fácil pensar que la disciplina se relaciona únicamente con el castigo u otras respuestas adversas a una conducta indeseable. Pero para que sea efectiva, la disciplina debe verse como una faceta de la crianza que surge de un lugar de respeto y un sentido de seguridad y claridad para el niño, enfocándose en las consecuencias lógicas del comportamiento en lugar de depender únicamente del castigo.

Por ejemplo, si un niño golpea a un hermano, los padres deben afirmar que el niño tenía sentimientos fuertes que resultaron en su acción agresiva. Hay que recordarles que aunque tengan ciertos sentimientos, no pueden ni deben expresarlos con agresión física.

Los padres pueden explorar cómo hizo sentir esta acción al hermano y brindarle al niño la opción de disculparse.

Conoce más: Crianza consciente, ¿qué cualidades requiere?

Crianza positiva

Los expertos promueven la «crianza positiva», que se describe como «un estilo de crianza que enseña el uso de la disciplina y que promueve la autoestima del niño mientras se corrige el mal comportamiento». La crianza positiva es proactiva y deliberada.

En la práctica, se aprecia de la siguiente forma: los padres desarrollan de antemano un plan de crianza que considera cómo les gustaría responder a sus hijos en determinadas circunstancias. De esa forma, cuando surge una inquietud, los padres pueden responder de una manera reflexiva y tranquila que explique cómo la acción del niño afecta a mamá/papá o a la persona que la recibe.

 

Fuente: Hackensack Meridian Health