La terapia cognitivo-conductual (TCC) es un método de tratamiento eficaz para una variedad de problemas de salud mental y emocional, como la ansiedad y la depresión.
La TCC tiene como objetivo ayudarte a identificar y desafiar los pensamientos inútiles y a aprender estrategias prácticas de autoayuda. Tales estrategias están diseñadas para generar cambios positivos inmediatos en tu calidad de vida.
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La TCC puede ser buena para cualquier persona que requiera apoyo para desafiar los pensamientos inútiles que le impiden alcanzar sus metas o vivir la vida que desea.
En concreto, la TCC se utiliza para tratar una variedad de problemas psicológicos, que incluyen:
- Ansiedad
- Trastornos de ansiedad como fobia social, trastorno obsesivo-compulsivo o trastorno de estrés postraumático
- Depresión
- Baja autoestima
- Miedos irracionales
- Hipocondría (obsesión con la idea de tener una enfermedad grave no diagnosticada)
- Abuso de sustancias, como fumar tabaco, beber alcohol, etc
- Ludopatía (trastorno mental que se caracteriza por la incapacidad de controlar el impulso de apostar dinero)
- Trastornos alimentarios
- Insomnio
- Problemas matrimoniales o de relación de pareja
- Ciertos problemas emocionales o de conducta en niños o adolescentes
Fuente: Better Health Channel