La resiliencia es una respuesta psicológica que ayuda a adaptarte a las dificultades de la vida, así como a buscar un camino para superar los desafíos.

Aunque todos tenemos la capacidad de ser resilientes, tu capacidad de resiliencia puede verse afectada con el tiempo por el estrés crónico, tal vez por la inestabilidad financiera o por permanecer en un trabajo que no te gusta. Cuanto más tiempo estés en esa situación, más difícil será afrontarla.

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Por suerte, es posible cultivar la resiliencia. Los expertos recomiendan las siguientes estrategias:

  1. Cambia tus pensamientos. En situaciones estresantes, intenta equilibrar tus pensamientos adoptando una perspectiva más amplia. Esto te ayudará a dejar de usar la parte emocional de tu cerebro y comenzar a utilizar su parte «pensante».
  2. Acércate a lo que quieres. Cuando estás ansioso(a), estresado(a) o agotado(a), tiendes a evitar las cosas que te hacen sentir incómodo(a). Esto puede llevar a que te sientas estancado(a). Lo que debes hacer es salir de tu zona de confort y dar un paso hacia lo que quieres, a pesar del miedo.
  3. Alinea tus acciones con tus valores. El estrés aparece cuando tus acciones no están alineadas con tus valores (las cosas que más te importan o te brindan alegría). Identifica tus tres valores principales y asegúrate de que tus acciones diarias se alineen con ellos. Si estar con la familia es uno de esos valores, haz que el tiempo que pasas con ellos sea una prioridad.

 

Fuente: Harvard Medical School