Una persona con diagnóstico doble —también conocido como diagnóstico dual o comorbilidad— tiene un trastorno mental y un problema de alcohol o con sustancias nocivas para la salud. Con frecuencia, estas afecciones ocurren al mismo tiempo.
A decir de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, cerca de la mitad de las personas que tienen una enfermedad mental también tendrán un trastorno por consumo de sustancias en algún momento de sus vidas y viceversa. Lamentablemente, las interacciones entre ambas condiciones pueden empeorarlas.
Aunque estos problemas a menudo ocurren juntos, no significa que uno haya causado al otro, incluso si uno apareció primero. De hecho, puede ser difícil determinar cuál fue primero.
Los investigadores piensan que hay tres posibilidades de por qué ocurren al mismo tiempo:
- Factores de riesgo comunes pueden contribuir tanto a los trastornos mentales como a los trastornos por consumo de sustancias: Estos factores incluyen la genética, el estrés y el trauma
- Las enfermedades mentales pueden contribuir al uso de drogas y a los trastornos por consumo de sustancias: Por ejemplo, las personas con trastornos mentales pueden usar sustancias nocivas o alcohol para tratar de sentirse mejor temporalmente. Esto se conoce como automedicación. Además, los trastornos mentales pueden cambiar el cerebro para aumentar la probabilidad de que se vuelva adicto
- El consumo de sustancias y la adicción pueden contribuir al desarrollo de un trastorno mental: El consumo de sustancias puede cambiar el cerebro y hacerlo más propenso a desarrollar un trastorno mental.
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¿Cuál es el tratamiento para el diagnóstico doble?
Una persona con un diagnóstico doble debe tratar ambas afecciones. Para que el tratamiento sea efectivo, debe dejar de consumir alcohol o sustancias nocivas.
Los tratamientos pueden incluir terapias conductuales y medicamentos. Además, los grupos de apoyo pueden brindar apoyo emocional y social. También son un lugar donde las personas pueden compartir consejos sobre cómo lidiar con los desafíos diarios.
Si tú o alguien cercano a ti enfrenta este tipo de problemas, busca ayuda y acércate a un profesional de la salud mental. Recuerda que tratar cualquier adicción o problema de salud mental puede mejorar en gran medida la calidad de vida.
Fuente: Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos
