Una persona sufre de infertilidad si no ha podido quedar embarazada después de intentarlo durante, al menos, 1 año, así lo indica Michigan Medicine, en Estados Unidos.
La fertilidad de una mujer desciende desde mediados de los 30 años hasta alcanzados los 40, debido principalmente al envejecimiento natural del suministro de óvulos. La fertilidad de un hombre no se ve tan afectada por la edad.
Con base en lo anterior, tu médico puede recomendar un tratamiento para la infertilidad si:
- Tienes un problema conocido que puede solucionarse con dicho tratamiento.
- Tienes infertilidad inexplicable y tu médico te ha propuesto una estrategia para abordarla y lograr un embarazo saludable.
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Dicho esto, es muy importante que tomes en cuenta los siguientes puntos clave antes de someterte a un tratamiento para la infertilidad:
- Los tratamientos de fertilidad pueden aumentar tus posibilidades de quedar embarazada, pero a veces no.
- El tratamiento puede ser estresante, costoso y doloroso. Si decides someterte a este, establece tus límites antes de comenzar. Habla con tu pareja sobre cuánto tiempo quieres intentar tener un bebé con ayuda médica. Decidan cuánto dinero pueden gastar.
- El tratamiento para la infertilidad no garantiza que tendrás un bebé.
- El tratamiento aumenta tus posibilidades de tener más de un bebé a la vez (embarazo múltiple). Asegúrate de discutir los riesgos con tu médico.
- En 10 de cada 100 parejas a las que se les hace la prueba de infertilidad, no se encuentra la causa.
Si tienes más dudas sobre este tema, consulta a tu médico.
