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El término albinismo suele referirse al albinismo oculocutáneo (AOC). El AOC es un grupo de trastornos que se transmiten de padres a hijos en los que el cuerpo produce poca o ninguna cantidad de una sustancia llamada melanina.

El tipo y la cantidad de melanina en el cuerpo determinan el color de la piel, el cabello y los ojos. Asimismo, la melanina desempeña un papel en el desarrollo y el funcionamiento de los ojos, por lo que las personas con albinismo desarrollan problemas de visión.

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Los síntomas del albinismo generalmente se observan en el color de la piel, el cabello y los ojos de una persona, pero en ocasiones las diferencias son leves. Las personas con albinismo también son sensibles a los efectos del sol, por lo que tienen un mayor riesgo de contraer cáncer de piel.

Cabe mencionar que, aunque no existe cura para el albinismo, las personas con el trastorno pueden tomar medidas para proteger su piel y sus ojos, así como obtener un cuidado adecuado para la piel y los ojos.

 

Fuente: Mayo Clinic