La visión de un bebé se desarrolla rápidamente. Durante los primeros seis meses, su vista suele convertirse en su sentido más fuerte, lo que le permite desarrollar importantes habilidades cognitivas y sociales.
Por ello, es importante que un pediatra revise los ojos de tu hijo(a) con regularidad. También es recomendable llevar a tu bebé a un examen ocular completo con un especialista durante el primer año, ya sea que muestre signos de problemas de visión o no.
Un proveedor de atención médica utilizará pruebas especializadas para detectar trastornos o enfermedades oculares, y el tratamiento ayudará a mantener a tu bebé encaminado(a) en todas las áreas del desarrollo.
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¿Cuándo se deben realizar los exámenes oculares infantiles?
A los bebés recién nacidos se les suele examinar la vista en el hospital poco después del nacimiento. Los pediatras realizan exámenes oculares de detección para hallar infecciones o problemas estructurales en los ojos, los cuales incluyen:
- Párpados malformados
- Cataratas
- Glaucoma
- Otras anomalías
Después de dicho examen inicial, los pediatras y oftalmólogos recomiendan que lleves a revisar los ojos de tu hijo(a) durante las visitas periódicas de control infantil. Durante el primer año, se recomienda que los bebés tengan visitas de control a partir de la primera semana después del nacimiento, luego al mes, a los 2 meses, a los 4 meses, a los 6 meses, a los 9 meses y a los 12 meses de edad.
Aunque estos chequeos son útiles, los expertos también recomiendan que los bebés sean revisados por un oftalmólogo alrededor de los 6 meses de edad para su primer examen ocular completo.
Este examen más exhaustivo puede detectar cuestiones como:
- Miopía
- Hipermetropía
- Astigmatismo
- Capacidad de movimiento ocular
- Alineación de los ojos
Fuente: Very Well Health
