La salud ocular es fundamental para mantener una buena calidad de vida. Aunque es recomendable realizar revisiones periódicas con un oftalmólogo, hay ciertos síntomas que no deben ignorarse y que requieren atención inmediata. Reconocer estos signos puede ayudarte a prevenir problemas más serios y a mantener una visión saludable.
Aquí te presentamos algunos síntomas clave que indican que debes visitar al oftalmólogo.
1. Visión borrosa o doble
La visión borrosa o doble puede ser causada por diversas razones, desde la necesidad de nuevas gafas hasta condiciones más serias como cataratas, glaucoma o problemas neurológicos. Si experimentas estos síntomas de forma persistente o repentina, es importante consultar a un especialista.
2. Dolor ocular
El dolor en los ojos nunca debe ser ignorado. Puede ser un indicio de infecciones, inflamación, glaucoma agudo de ángulo cerrado o incluso una lesión. Si sientes dolor ocular intenso o persistente, busca atención médica de inmediato.
3. Enrojecimiento persistente
Aunque el enrojecimiento ocasional de los ojos puede ser normal, especialmente después de una larga jornada o exposición a irritantes, el enrojecimiento persistente puede señalar infecciones, conjuntivitis, uveítis o glaucoma. Un oftalmólogo puede determinar la causa y ofrecer el tratamiento adecuado.
4. Sensación de cuerpo extraño
La sensación constante de tener algo en el ojo puede ser causada por sequedad ocular, abrasiones corneales, infecciones o cuerpos extraños reales. Este síntoma puede provocar molestias y potencialmente dañar la superficie del ojo si no se trata.
5. Cambios en la visión nocturna
Si notas dificultades crecientes para ver en la oscuridad o una sensibilidad anormal al deslumbramiento de las luces por la noche, podría ser un signo de cataratas o retinopatía. Estos cambios requieren una evaluación oftalmológica para determinar la causa y el tratamiento necesario.
6. Pérdida de visión
La pérdida de visión repentina o progresiva es un síntoma alarmante que debe ser evaluado de inmediato. Podría ser causada por problemas graves como desprendimiento de retina, accidente cerebrovascular, degeneración macular o glaucoma. La intervención temprana puede ser crucial para prevenir una pérdida de visión permanente.
7. Flotadores y destellos de luz
Los flotadores (manchas o formas que parecen moverse en tu campo de visión) son comunes, especialmente con la edad. Sin embargo, si experimentas un aumento repentino de flotadores o ves destellos de luz, esto podría ser un signo de desprendimiento de retina, una condición que requiere atención médica urgente.
8. Ojos secos y sensación de ardor
La sequedad ocular y la sensación de ardor pueden ser molestos y, si son persistentes, pueden indicar el síndrome de ojo seco, alergias o disfunción de las glándulas de Meibomio. Un oftalmólogo puede recomendar tratamientos para aliviar estos síntomas y mejorar la comodidad ocular.
9. Problemas para enfocar
Dificultades para enfocar objetos cercanos o lejanos, especialmente si ocurren de manera repentina, pueden ser un signo de presbicia, hipermetropía o astigmatismo. Un examen oftalmológico puede ayudar a determinar la causa y la corrección necesaria, ya sea con gafas o lentes de contacto.
10. Cambios en el color de la esclera
La esclera, o la parte blanca del ojo, puede cambiar de color debido a diversas condiciones. Un color amarillento puede indicar problemas hepáticos, mientras que un tono azul o gris puede ser signo de enfermedades genéticas o sistémicas. Estos cambios deben ser evaluados por un oftalmólogo para identificar la causa subyacente.
Cuidar de tus ojos es esencial para mantener una buena calidad de vida. Si experimentas alguno de estos síntomas, no dudes en visitar a un oftalmólogo. ¡No esperes a que los problemas empeoren, cuida de tu salud visual hoy mismo!
Fuente: Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos
