Si te sientes tímido(a) y te preocupan los dientes chuecos o protuberantes, no estás solo(a). No todos tienen una alineación naturalmente perfecta, pero gracias a la ortodoncia, puedes tener eso.
La Academia Americana de Ortodoncia (AAO) la describe como un área de la odontología que previene, diagnostica y trata las irregularidades dentales y faciales. Si necesitas tratamiento de ortodoncia, tu dentista familiar o de cabecera generalmente te referirá a un ortodoncista. Estos especialistas odontológicos estudian de dos a tres años adicionales, tiempo durante el cual aprenden los métodos para mover los dientes con seguridad y alinearlos adecuadamente, guiar el desarrollo facial y garantizar un crecimiento saludable en la mandíbula.
Tipos de problemas de ortodoncia
Las desalineaciones dentales, llamadas maloclusiones, pueden indicar una cantidad de condiciones diferentes. Las maloclusiones hereditarias incluyen problemas de crecimiento mandibular, dientes congénitos faltantes, dientes extra, dientes amontonados o que se han desplazado hacia adelante y problemas de espaciamiento. Sin embargo, la pérdida prematura de los dientes de leche, la retención de dichos dientes, la succión del pulgar o los dedos, los accidentes y ciertos tipos de enfermedades dentales también pueden dar lugar a la necesidad de un tratamiento de ortodoncia.
Importancia del tratamiento de ortodoncia
La corrección de problemas de ortodoncia no se trata sólo de ajustes cosméticos y de mejorar la confianza en uno mismo; también hay razones de salud dental muy importantes. Según la AAO, las maloclusiones pueden causar dificultad para masticar y hablar, ya que desgastan el esmalte de los dientes sanos y ejercen un estrés excesivo sobre el tejido de las encías y el hueso circundante. Además, los dientes que están torcidos o superpuestos son difíciles de limpiar, lo que puede ponerte en riesgo de caries y enfermedades periodontales.
Actualmente, tanto niños como adultos están viendo los beneficios del tratamiento de ortodoncia. Un incentivo adicional para el adulto que trabaja es que los aparatos de ortodoncia hoy son más discretos de lo que lo eran en el pasado. La duración del tratamiento generalmente es más corta.
Todavía son comunes las abrazaderas metálicas de acero inoxidable (los famosos brackets), pero la Academia de Odontología General (AGD) menciona una amplia variedad de otros materiales que son igualmente efectivos para mover los dientes. Por ejemplo, las abrazaderas de cerámica transparentes que se usan en los dientes delanteros son mucho menos visibles que el metal, aunque puede que no sean tan resistentes. Completamente ocultas a la vista están las abrazaderas linguales, que se unen a la parte posterior de los dientes. Incluso existe la opción de abrazaderas claras y removibles, que pueden quitarse para que comas y limpies cómodamente tus dientes.