Diabetes, Obesidad y nutrición, Riñones
Muchos de nosotros hemos tenido en algún momento problemas con nuestro peso, y sumado a esto, tener que batallar con condiciones asociadas a esos kilos de sobra, como lo es por ejemplo la diabetes. Con estos achaques, a veces solo quisiéramos que existiera un medicamento mágico y milagroso que nos ayudara a desaparecer de una vez por todas estos males, o por lo menos que nos permitiera tener un mejor control de la enfermedad sin estar todo el tiempo preocupados.
Pues ahora, y pareciendo que nuestras plegarias fueron escuchadas, México recién aprobó un medicamento de nombre Liraglutida, el cual ingresa al mercado farmacéutico nacional como el primer fármaco inyectable que sirve como tratamiento para bajar de peso y además colabora en el control de la glucosa para pacientes con diabetes tipo II. ¿Pueden creerlo?
El medicamento, que fue autorizado por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), es una sustancia que afecta a la hormona llamada glucagón tipo 1 (GLP 1), la cual se produce en nuestro intestino y permite regular el hambre y la saciedad, de manera que hace más lento el proceso de vaciado de nuestro estómago y, por lo tanto, hace que tengamos menos ganas de comer nuevos alimentos.
El fármaco fue creado por la firma danesa Novo-Nordisk, y por si fuera poco, también estimula a las células beta del páncreas para que produzcan más insulina en las personas con diabetes tipo II, reduciendo así la posibilidades de tener que inyectarse esta hormona para controlar su glucosa en sangre. ¡Qué maravilla! ¿No es así?
Liraglutida es un inyectable que se aplica por debajo de la piel. Para ello utiliza una pluma con una base de 18 miligramos del medicamento y se receta de manera escalonada a partir de 0.6 miligramos por semana, hasta llegar a dosis de tres miligramos.
De acuerdo con el doctor Juan Gabriel Cendales, director médico de Novo Nordisk México, el medicamento cuesta mil 50 pesos y dura más o menos cinco semanas.
Por su parte, la doctora Guadalupe Castro Martínez, directora de la Facultad de Medicina de la Universidad La Salle, dijo que es importante subrayar que solo el médico tratante debe hacer los ajustes necesarios en el paciente en cuanto a la dosis que debe recibir, principalmente si se administra insulina o medicamentos orales, como metformina.
La especialista agregó que aunque el fármaco provoca un efecto fisiológico saciante y ha demostrado ser eficaz en la reducción de peso, no debe dejarse de lado el cuidado nutricional y la actividad física.
Liraglutida fue probado en un estudio de tres años con 171 pacientes mexicanos, en 11 centros hospitalarios de la Ciudad de México, Cuernavaca, Chihuahua, Guadalajara y Monterrey. Los efectos secundarios que observaron los médicos fueron en el aparato digestivo, principalmente náuseas y vómitos.
En promedio, los pacientes con diabetes redujeron la cantidad de azúcar en su sangre entre uno y 1.5 por ciento. Esto es muy importante si consideramos que cada punto porcentual que baja la glucosa, se reduce en 20 por ciento el riesgo de que el paciente tenga daños en las arterias y vasos que podrían producirle ceguera por retinopatía y daño en el riñón, así como otros efectos graves.
Datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012 demuestran que el sobrepeso u obesidad afecta a 71.28 por ciento de los adultos mexicanos. Tan solo en la Ciudad de México, 73.6 por ciento de los adultos viven con un peso excesivo, hecho que pone en peligro su salud.
Asimismo, no olvidemos que la obesidad ha sido vinculada directamente con 14 tipos de enfermedades, incluyendo la diabetes tipo II, el cáncer, las enfermedades cardiovasculares e incluso la muerte, por lo que debemos entenderla y atenderla de manera integral (llevar una dieta adecuada, hacer ejercicio de forma regular, dormir 8 horas diarias, etc.).
Vía: Agencia ID
