El estudio realizado por la Universidad de Michigan encontró que la prevalencia de enfermedad renal era más alta en las áreas de Estados Unidos con índices de contaminación del aire más altos.
Para el estudio los investigadores analizaron información médica de 1.1 millones de pacientes del sistema de salud pública de Estados Unidos, además de datos de la Agencia de Protección Ambiental sobre la calidad del aire de todos los condados de aquel país.
Tras tomar en cuenta factores como la edad de los individuos y problemas de hipertensión o diabetes, los investigadores encontraron una asociación entre enfermedad renal crónica y niveles altos de contaminación del aire, entre más contaminado estuviera un condado mayor era la posibilidad de que los individuos contrajeran enfermedad renal.
La autora del estudio Jennifer Bragg-Gresham de la Universidad de Michigan resaltó que en caso de que se confirme que la contaminación del aire es un factor de riesgo para la enfermedad renal, el impacto sería mayor en países que tengan índices de contaminación del aire mayores que los de Estados Unidos.
Este estudio demostró además que aun cuando los niveles de contaminación estén por debajo del nivel que generalmente se considera peligroso, pueden ser los suficientemente altos como para ser nocivos para adultos mayores o población de riesgo.
Los investigadores recalcaron que estos datos se deben tomar como preliminares, debido a que se deben realizar mayores estudios sobre la relación entre la contaminación del aire y la enfermedad renal, además de que el estudio debe ser publicado en una revista especializada.
La recomendación general para tener una buena salud es acudir al médico en cuanto se tengan sospechas de cualquier tipo de enfermedad y por supuesto no automedicarse, el tratamiento solo lo puede designar un especialista calificado.
Vía: Health Library.