En todo el mundo las personas están viviendo más años. Esta afirmación fue hecha por la Organización Mundial de la Salud (OMS) a través de sus Estadísticas Sanitarias Mundiales 2014, publicadas el pasado 15 de mayo.
Así, con base en promedios mundiales, la esperanza de vida de una niña nacida en 2012 es de aproximadamente 73 años, mientras que la de un niño es de 68; es decir, seis años más que los niños nacidos en 1990.
Según este informe, son los países de bajos ingresos en donde se han registrado mayores progresos. Es el caso, por ejemplo, de Liberia donde la esperanza de vida aumentó de 42 años en 1990 a 62 en 2012; Etiopía, de 45 a 64 y Maldivas de 58 a 77.
“Una razón importante de la impresionante mejora registrada a nivel mundial en la esperanza de vida es que el número de niños que mueren antes de cumplir los cinco años ha disminuido«, explicó la doctora Margaret Chan, directora general de la OMS.
“Sin embargo, sigue habiendo un considerable desfase entre ricos y pobres: las personas de los países de altos ingresos siguen teniendo muchas más probabilidades de vivir más años que las personas de países de bajos ingresos.”
El niño que fue dado a luz en 2012 en un país de altos ingresos alcanzará un promedio de 76 años, lo que significa 16 más que otro varón nacido en un país de bajos recursos, quien vivirá aproximadamente 60.
En el caso de las niñas este desfase puede ser hasta de 19 años.
De igual forma, el reporte indica que las mujeres, en cualquier lugar del mundo, viven más que los hombres. Es en Japón donde tienen una esperanza de vida más larga con 87 años, seguidas de España, Suiza y Singapur.
En nueve países, entre los que destacan Islandia, Suiza y Australia, los hombres alcanzan a vivir 80 años.
A decir del doctor Ties Boerma, director del Departamento de Estadísticas y Sistemas de Información Sanitarios de la OMS, estos logros en los países de altos ingresos se deben en gran parte al éxito en el control de las enfermedades no transmisibles.
Los países ricos, por ejemplo, han mejorado el seguimiento y control de la hipertensión arterial. En varios países, además, la reducción del consumo de tabaco también ha contribuido en forma crucial para aumentar las expectativas de vivir más años.
Estas estadísticas proporcionan datos de 194 países sobre indicadores de mortalidad, enfermedad y sistemas de salud, incluidos los relativos a la esperanza de vida, enfermedades y defunciones por enfermedades principales, entre otros.
Vía: OMS